Receta: Pollo al limón al estilo chino

Si has visitado alguna vez un restaurante chino, seguramente habrás probado alguna vez el pollo al limón al estilo chino. Sabemos que lo que encontramos en estos restaurantes no son precisamente recetas sacadas de la tradición china, sino de platos adaptados al gusto occidental y con ingredientes que se pueden encontrar en España.

Por eso vamos a preparar uno de esos platos que no suelen faltar en las cartas de los restaurantes chinos, paso a paso. Lo ideal de este plato es acompañarlo con un rico arroz tres delicias (que también es un invento que nació en los restaurantes europeos y se extendió por todo el mundo.

El pollo al limón al estilo chino es una receta nacida en Europa y podemos hacerla tranquilamente en casa

Estos son los ingredientes para preparar este plato, que seguro que entusiasmará a los más pequeños de la casa:

– 2 Pechugas grandes  de pollo

– Pan rallado

– 2 Huevos

– 50 Gramos de harina

– 4 Limones 

– 50 Gramos de azúcar

– 10 Gramos de maizena

Primero vamos a preparar las pechugas de pollo, trabajándolas con el martillo para que queden bien planas. Una vez hecho esto, se ha de eliminar la grasa y después se cortan las pechugas en cuatro trozos del mismo tamaño aproximadamente. Antes de reservar, les añadiremos un poco de sal y si quiere, un poquito de pimienta molida.

En un tazón batiremos los huevos y luego rebozaremos cada pieza de pechuga en la maizena (harina de maiz). Luego los bañaremos en el huevo y se cubrirán con pan rallado. En una sartén, con el aceite ya caliente, se freirán durante unos tres minutos y se dará la vuelta para freírlas por la otra cara.

Los limones han de exprimirse, aunque dejaremos dos rodajas para decorar el plato. En una cacerola pondremos 360 cl de agua, aproximadamente un vaso y medio. Cuando comience a hervir, se añadirá el zumo de limón y el azúcar. Mientras hierve durante unos 10  minutos, se ha de hacer una mezcla conlos 10 gramos de harina de maiz y una cucharada de agua, removiendo bien. Después se añade al agua con limón que sigue hirviendo y se deja que continúe durante unos dos minutos.

El pollo se sirve en un plato, troceado como lo hacen en un restaurante chino, si se prefiere, y se cubre con la salsa. Cada comensal puede servirse de ese plato central y acompañarlo con arroz, para recordar la visita a tu restaurante chino preferido.